29 de mayo de 2011

Visita a Toledo

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Toletum etsi parva urbs tamen loco munito (Toledo aunque era una ciudad pequeña estaba en lugar estratégico) (Del 17 a.C. al 60 d.C. (Tito Livio)

* ¿Ves el río? ¿Qué río ? ¿Qué más divisas? Redacta lo que ves. En ese tiempo se "cargaron" fuerzas para iniciar la visita a pie.

Después de contemplar Toledo desde el Parador el autocar nos dejó para iniciar el resto de las visitas a pie.
Lo primero que teníamos que ver era: La Sinagoga de Samuel ha-Leví, conocida popularmente como Sinagoga del Tránsito, es la muestra arquitectónica más importante del pasado hispanojudío. Está situada en el barrio judío al oeste de la ciudad. Fue mandada construir por Samuel ha-Leví a mediados del siglo S. XIV. Adornada en estilo mudéjar con bellos motivos decorativos polícromos e inscripciones hebreas y árabes, es uno de los más bellos ejemplos de sinagoga. Fue donada por los Reyes Católicos a la orden militar de Calatrava. Durante las guerras napoleónicas se utilizó como barracón militar. En 1877 fue declarada monumento nacional. Tras su restauración pasó a formar parte de las fundaciones Vega-Inclán.
Hoy, es el lugar donde se ubica el Museo Sefardí, del Ministerio de Educación y Cultura.

La siguiente visita fue el Museo de El Greco (antiguamente se llamaba la Casa del Greco). Situado en el corazón de la judería, la casa que alberga este museo perteneció a Samuel Leví, tesorero del rey Pedro I de Castilla y con posterioridad, fue del Marqués de Villena. El Greco habitó durante algún tiempo esta casa.
Constituye un bello conjunto que da idea de cómo era una casa acomodada de los siglos XVI-XVII.  Comprende un patio con jardín y diversas estancias amuebladas al gusto de la época.
Entre las obras de El Greco que se exhiben, destacan:

El Apostolado
San Bernardino
Vista y Plano de Toledo
El Redentor


A continuación, teníamos que visitar la Mezquita del Cristo de la Luz.
Mezquita de la época califal, aproximadamente año 1.000 d.C., posteriormente transformada con la construcción en su parte posterior de un ábside para reconvertirla en templo de culto cristiano en la época de Alfonso VI y dedicada desde entonces a la religión cristiana (año 1.200 d.c.).
Fué decorada su parte interior a finales del siglo XIII con frescos en sus paredes, apareciendo en éstas la figura del Pantocrator  rodeado de varios santos. Es la representación de la arquitectura que se encuentra a caballo de la época califal y el periodo mudéjar. En diciembre de 1999 se cumplieron mil años desde su construcción .

Ya era la hora de comer. Nos dirigimos hacia la Catedral, punto de encuentro para tener el tiempo de la comida. Quedaba por visitar las Cuevas de Hércules y emprender a continuación, atravesando nuevamente Toledo, la vuelta al autocar que nos esperaba al otro lado del río.
Las "Cuevas de Hércules" resumen en cierto modo la tradición "subterránea" de Toledo. La tradición dice que este lugar fue labrado por Tubal o Hércules el Egipcio y sería la cátedra secreta desde la que el propio Hércules enseñaba las ciencias ocultas. Se decía que en esas cuevas había figuras o pinturas escondidas antes de la llegada de los árabes, cuyo desvelamiento acarrearía grandes males. En estas cuevas se sitúa también el tesoro que encuentra el joven judío del manuscrito de Roso de Luna, por sólo poner algunos ejemplos.

Ante de llegar al autocar contemplamos una larga fila de familias que esperaban el reparto de comida. La crisis no es ajena al turismo de esta ciudad.